Para las 10:00 horas del próximo miércoles 20 de marzo quedó fijada la audiencia de reformalización de la investigación contra un hombre de 35 años acusado por su responsabilidad en la muerte de su hijo Francisco Javier, de 2 meses de edad, como consecuencia del denominado síndrome del niño sacudido.

El bebé falleció pasadas las 08:00 horas del martes en la Clínica Reñaca, en Viña del Mar, luego de aproximadamente cinco días con muerte cerebral como resultado del zamarreo que sufrió a manos de su padre en su hogar del condominio Los Aromos de Quilpué.

La acción que dio muerte al pequeño tuvo lugar el jueves 7 de marzo, cerca de las 23:45 horas, cuando su padre habría reaccionado violentamente frente al llanto de su hijo. Según la información de la Fiscalía el sujeto lo zamarreó, arrojó contra una cama, golpeándolo en el cuerpo y haciéndolo sangrar. Su esposa reconoció estos hechos a la Brigada de Homicidios de la PDI.

La hemorragia intracraneana y retiniana que presentaba el bebé y que a juicio de los médicos era síntoma inequívoco de maltrato infantil, motivó la formalización del sujeto por parricidio frustrado.

El sábado el imputado quedó en prisión preventiva y se fijó un plazo de tres meses para terminar la investigación. Ahora se renormalizará por parricidio consumado, delito que tiene contemplada penas de hasta presidio perpetuo calificado. La investigación es encabezada por el fiscal adjunto jefe de la Fiscalía Local de Quilpué, Juan Emilio Gatica.