Málaga, en su primera participación en la Liga de Campeones, superó por 2-0 a Porto de Portugal y se acerca a los cuartos de final de la máxima competición de clubes a nivel europeo.

Un primer tiempo batallado en el centro del campo, donde Manuel Iturra fue factor clave en la recuperación en el centro del campo.

Málaga empezó a cargar la cancha en el último cuarto de hora, donde la presencia de Baptista, Saviola e Isco comenzó a preocupar a la zaga lusitana.

Un pase de Iturra encontró a Isco, quien sacó un brutal remate desde fuera del área para batir al portero del equipo portugués y equiparar la serie.

En el segundo tiempo, la expulsión de Defour marcó la apertura de la franja derecha del ataque del Málaga, donde Joaquín y Saviola se conectaron y comenzaron a generar riesgo en una escuadra a la que el ingreso del centrocampista colombiano James Rodriguez no le ha cambiado el rostro.

En el último tramo del partido, el ingreso del paraguayo Roque Santa Cruz se hizo notar de entrada, ya que el delantero se impuso por alto para marcar el segundo tanto del cotejo, cuando en el ambiente se respiraba la prórroga.

Un desahogo necesario para las casi 20 mil personas que repletaron La Rosaleda y que vibran con la clasificación de su escuadra al selecto grupo de ocho principales equipos del Viejo Continente, que sorteará las series el viernes en Suiza.