Perseguido en varios países por atentar contra las leyes de protección de datos, Google acordó pagar una multa de 7 millones de dólares en Estados Unidos este martes por recoger sin autorización información de redes privadas inalámbricas mientras recopilaba imágenes para su servicio Street View.

Entre 2008 y 2010, a través de sus ya famosos vehículos Street View, que recorrían las calles de las ciudades tomando fotos para los servicios de geolocalización del grupo, se recolectaron paralelamente datos de redes privadas inalámbricas (Wi-Fi) sin proteger y sin la autorización de sus propietarios, como correos electrónicos o contraseñas.

Google habría violado de esta forma las leyes locales en al menos nueve países, según la organización Electronic Privacy Information Center (EPIC).

En un acuerdo judicial con 38 estados estadounidenses, el gigante de internet accedió a no utilizar, a destruir o a vender a terceros los datos obtenidos de esta manera.

Además acordó poner en marcha un programa para sensibilizar a sus empleados sobre la importancia de la confidencialidad de los datos, así como una campaña para informar a sus usuarios de la forma de proteger la información en las redes inalámbricas.

“Este acuerdo aborda las cuestiones de privacidad y protege los derechos de las personas cuya información fue recogida sin su permiso”, dijo el fiscal de Nueva York, Eric Schneiderman, en un comunicado.

“Los consumidores tienen derecho a proteger su información personal y financiera de un uso indebido y no deseado por parte de empresas como Google”, agregó.

“Los datos no fueron usados”

“Trabajamos duro para respetar la privacidad en Google. Pero no lo hicimos en este caso, por lo que hemos reforzado nuestros sistemas para resolver esta cuestión. Los directores del proyecto nunca quisieron estos datos, no los utilizaron o incluso los miraron”.

La organización sin fines de lucro de defensa de los consumidores Consumer Watchdog dijo que la multa y las condiciones del acuerdo como insignificantes para la compañía multimillonaria.

“Los 7 millones de dólares de multa son moneditas para Google”, afirmó el director del proyecto de Consumer Watchdog, John Simpson.

“Pedir a Google que eduque a sus consumidores sobre privacidad es como pedir al zorro enseñar a los pollos para asegurar la seguridad de su gallinero”.

La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por su sigla en inglés) realizó una investigación sobre Street View que finalizó en mayo del año pasado. La oficina concluyó que no podía acusar a Google de violar la ley pero quería que la compañía fuera multada por no cooperar lo suficientemente rápido.

Google por su parte pagó los 25.000 dólares de multa, pero mantuvo que la culpa del retraso fue de la FCC y no de la compañía.

El gigante de internet ha dejado desde entonces de recoger datos de Wi-Fi con los vehículos de Street View, y se ha comprometido a no hacerlo sin previo aviso y consentimiento, según afirmó en un comunicado.

Las imágenes callejeras de 360 grados captadas por de Street View, lanzado en 2006, se ofrecen con el servicio Google Maps para obtener direcciones en ciudades como Nueva York, París o Hong Kong.