Roger Federer, número dos del mundo, y Andy Murray (N.3) expresaron su satisfacción tras el anuncio este jueves por la Federación Internacional de Tenis (ITF, por sus siglas en inglés) de la introducción este año del pasaporte biológico en la lucha contra el dopaje en el deporte.

El máximo órgano del tenis mundial realizó este anuncio a la conclusión de un grupo de trabajo reunido en Londres esta semana con el fin de estudiar un programa contra el dopaje y en el que estuvieron presentes representantes de la ITF, la ATP (circuito masculino), la WTA (circuito femenino) y los organizadores de los Grand Slams.

Esta decisión implica un aumento en el número de análisis de orina y de sangre, incluyendo pruebas fuera de la competición, bajo la supervisión de la ITF.

“Esta es una buena noticia”, dijo Federer el jueves en una conferencia de prensa antes de su primer partido este fin de semana en el Masters 1000 de Indian Wells.

“Debería hacerse todo lo posible para que nuestro sistema sea tan limpio como sea posible y este es un paso en la dirección correcta”, añadió Federer. “Los tramposos lo van a pensar dos veces”, agregó.

Estos últimos meses, el suizo de 32 años así como número 1 del mundo, el serbio Novak Djokovic, y el escocés Murray, han clamado por la introducción de esta herramienta, considerada como una de las armas más eficaces en la lucha contra el dopaje.

“Esto es una cosa muy buena que se ha puesto en marcha rápidamente” reaccionó Murray, ganador del Abierto de Estados Unidos de 2012. “Esta es una de las mejores formas de asegurar que nuestro deporte se mantiene limpio”.

La adopción del pasaporte biológico en el tenis llega después de una iniciativa lanzada en el 2008 por el ciclismo, a la que se unieron posteriormente el triatlón, atletismo, natación, esquí y fútbol, que lo aplicará durante la Copa del Mundo 2014 en Brasil.

Su principio consiste en detectar el dopaje no por una sustancia prohibida, sino por la observación de las variaciones de diversos parámetros biológicos tales como hematocritos o hemoglobina en la sangre.

Las pruebas permiten establecer y mantener un perfil apropiado para cada atleta. En caso de variaciones anormales de sus parámetros, el atleta puede ser sospechoso de dopaje.

La Federación Internacional de Tenis ha realizado 2.185 pruebas en el 2012, incluyendo 187 pruebas de sangre, pero no especifica qué porcentaje de su presupuesto total anual (aproximadamente 1,2 millones de euros) gasta en la lucha contra el dopaje.

Federer reiteró que los jugadores de todos los niveles deben ser examinados más a menudo, un tema que reiteró en varias ocasiones en el último mes.

“Si tienes suerte, como yo el año pasado, que gané el torneo de Rotterdam, Dubai e Indian Wells sin pasar un solo control de dopaje, pero no debería ser así”, dijo el suizo, actual campeón defensor en Indian Wells, pero que no ha ganado un torneo esta temporada.

Interrogado sobre el tema en otra rueda de prensa previa en Indian Wells, el español Rafael Nadal -un ex-número uno que cayó al quinto lugar mundial después de siete meses fuera debido a una lesión-, simplemente indicó que “cualquier cosa que haga que el deporte sea más limpio es una buena cosa”.