La aviación siria bombardeó este jueves la ciudad de Raqa, primera capital provincial conquistada por los rebeldes desde el comienzo del conflicto, informó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
Los medios aéreos son la principal ventaja de las fuerzas gubernamentales en el conflicto que les opone desde hace dos años a los rebeldes, peor equipados. Los insurgentes se benefician, no obstante, del desgaste de las fuerzas regulares, repartidas por todo el territorio sirio.
Esta ciudad cercana a la frontera turca lleva desde el miércoles bajo control de los rebeldes, que capturaron el lunes al gobernador y se apoderaron de la sede de los servicios de inteligencia militar, uno de los centros de detención en la provincia de Raqa, según el OSDH.
En el edificio se izó la bandera del Frente Yihadista Al Nosra, cada vez más influyente sobre el terreno, precisó la organización este jueves.
“Cientos” de milicianos prorrégimen y de soldados se rindieron a los rebeldes en la ciudad, según el Observatorio, que teme por su suerte.
En la ciudad de Homs, el ejército también bombardeaba este jueves el barrio rebelde de Jaldiyé, que las fuerzas del régimen intentan retomar desde hace meses, y se registran combates encarnizados entre los dos beligerantes.
Según el OSDH, dos miembros de Al Nosra hicieron estallar el miércoles dos coches bomba frente a retenes del ejército en la entrada de Homs, “en un intento por entrar en la ciudad”.
