En el Valle Nonguén, puntos críticos que años anteriores sufrieron graves inundaciones, fueron inspeccionados por el alcalde de Concepción, mientras se desarrollan trabajos de limpieza de colectores de aguas lluvias.

36 mil metros lineales de canales en Concepción debe mantener el municipio penquista, a través del despeje y limpieza de sus colectores de agua.

Cada dos meses los camiones municipales revisan los puntos críticos y eliminan residuos, basuras domiciliarias y ramas de árboles que interrumpen el paso libre del agua lluvia, cuya acumulación provoca inundaciones ya conocidas sobre todo en los alrededores de Collao y Nonguén.

Junto con llamar a la preocupación de los mismos vecinos, el alcalde Álvaro Ortiz, explicó cómo estos sectores enfrentarán el invierno que se avecina.

20 personas de mano de obra directa encabezan las faenas de limpieza en el Valle Nonguén, según comentó el encargado de servicios a la comunidad David Torres.

Eso sí durante la visita a terreno Ortiz, escuchó las inquietudes de los habitantes que expusieron su preocupación por eventuales derrumbes al momento en que se inicien obras en un camino privado que por lo demás afirman no cuenta con los respectivos permisos. Así lo relató Fernando Rojas, vecino del sector.

El gobierno por su parte está a cargo del Sistema Fluvial Andalién, con extensión de 2 kilómetros, obra que incluye la ampliación del estero Nonguén y el estero Palomares ya concluida que ahora concentra esfuerzos en la canalización del Río Andalién, obra en ejecucion por el MOP.