Una tormenta de nieve en el norte de Estados Unidos, que se desplaza hacia Washington, causó este martes la anulación de más de 2.600 vuelos, además del cierre de rutas y de cientos de escuelas en muchas áreas del país.

Al menos cuatro personas murieron en accidentes en las carreteras y autopistas cubiertas de hielo y nieve.

Más de una docena de estados, desde Minnesota (norte) a Virginia (este), estaban en el camino de la tormenta, que ha causado nevadas de hasta 60 cm de altura en Montana (noroeste).

“Las grandes cantidades de nieve que deben caer harán que los desplazamientos sean peligrosos”, advirtieron los servicios estadounidenses de meteorología.

Unos 900 aviones debieron permanecer en tierra en el aeropuerto O’Hare de Chicago (Illinois, norte), uno de los más importantes del país y donde había hasta 25 cm de nieve, mientras otros 260 se encontraban varados en el Chicago Midway, la otra terminal de la ciudad, y 100 vuelos fueron anulados en Minneapolis (Minnesota, norte).

En total 1.465 vuelos fueron suspendidos, según el sitio especializado FlightAware.

Pero otros 1.162 vuelos previstos para el miércoles fueron también cancelados, principalmente en el área de Washington.

La tormenta, acompañada por vientos fuertes, se movió hacia el este e iba al encuentro de otro frente en el área de los montes Apalaches la noche del martes. Así, debe golpear entonces a la capital estadounidense, Washington, entre la noche del martes y la madrugada del miércoles, lo que se espera produzca una fuerte nevada que puede dar lugar a la cancelación de algunos eventos.

“La depresión se convertirá en una tormenta más poderosa al llegar a los estados ribereños del Atlántico”, dijo a la AFP Dan Petersen, de los servicios meteorológicos nacionales.

“Podría haber caída de fuertes nevadas, que podrían hacer caer ramas de árboles o tendidos eléctricos”, agregó.

Se espera que unos 10 a 20 cm de nieve se acumulen en Washington.