Siguen los líos para el Colo Colo de Labruna fuera de la cancha, más allá de lo ocurrido el pasado fin de semana ante Deportes Antofagasta.

Ahora fue el turno del portero Eduardo Lobos, quien adquirió un teléfono celular que le generó sospechas respecto a su procedencia.

Según contó Juan Gutiérrez, director deportivo del cuadro popular, Lobos y él compraron los aparatos a Luis Estrada Cortés, quien se dedica a la venta en forma legal, pero los productos estaba siendo rastrados por la Policía de Investigaciones (PDI), por denuncia de sus dueños originales.

Así, tanto Gutiérrez como Lobos debieron declarar ante la PDI, en una investigación que recién se inicia. Luego de entregar este miércoles su versión, recién el portero pudo reintegrarse a las prácticas de los albos.

“Hace ocho o nueve meses atrás compré un teléfono dentro de la legalidad, porque a quien se lo compre trabaja en eso, tiene negocios e incluso me lo vendió con boleta. Luego supe que era robado”, declaró Juan Gutiérrez, tras la reunión de directorio de Blanco y Negro.

De hecho, fue el mismo Gutiérrez quien recomendó a Lobos concurrir voluntariamente a declarar a la PDI.