Personal de la Brigada de Homicidios de la PDI de Chillán detuvo a un sujeto de 30 años por su presunta responsabilidad en el homicidio del sacerdote Cristián Fernández Fletá, hecho ocurrido el 6 de abril del 2009 en Chillán.

El asesinato del religioso provocó gran conmoción en la comunidad chillaneja y presentó importantes complejidades para la policía civil, que durante estos casi cuatro años barajó un abanico de líneas investigativas, las que fueron descartadas una por una, hasta dar con el supuesto autor de las 16 puñaladas que dieron muerte al clérigo.

“Se trata de una investigación de largo aliento y que involucró el trabajo de detectives de la Brigada de Homicidios, el Laboratorio de Criminalística y la coordinación constante con al Fiscalía Local de Chillán”, señaló el jefe subrogante de la VIII Región Policial del Bío Bío, subprefecto Max Fernández Gago.

El subprefecto Fernández agregó que “el periodo de indagatorias involucró una serie de empadronamientos y toma de declaraciones lo que significó ir descartando las diferentes aristas investigativas, hasta acotar la investigación en un grupo de sospechosos, para finalmente vincular a través de evidencia científica al imputado con el sitio de suceso”.

El alto oficial indicó además que “este trabajo se inició con un análisis criminalístico del sitio de suceso, donde personal experto y peritos ubicaron y levantaron importantes evidencias científicas, principalmente muestras biológicas las que nos permitió finalmente vincular al imputado con este homicidio”.

El análisis de una muestra de sangre levantada por la PDI en la escena del crimen fue fundamental para identificar al presunto responsable del homicidio del religioso, ya que el perfil de ADN del imputado coincide con la muestra analizada por personal policial experto.

El detenido, identificado como Elías Ricardo Cartes Parra, fue trasladado este martes por la PDI hasta el Juzgado de Garantía de Chillán donde fue formalizado por el delito de homicidio.

Recordemos que Cristián Fernández Fleta, oriundo de Puerto Saavedra, fue asesinado de 16 puñaladas en el abdomen y el corazón en Chillán, cuando viajó por una causa que mantenía pendiente y que se relacionaba a una infracción por un supuesto manejo en estado de ebriedad.