Un servicio israelí de autobuses reservado a los trabajadores palestinos de Cisjordania comenzó a funcionar este lunes, según constataron periodistas de la AFP.

El servicio, que conecta al paso de Eyal, cerca de Qalqiliya, en Cisjordania, con ciudades israelíes, no está destinado a los colonos, que se han quejado en el pasado por tener que compartir medios de transporte con palestinos, invocando riesgos de atentados.

“Las nuevas líneas de autobuses están destinadas a los trabajadores palestinos que ingresan a Israel por el paso de Eyal, para sustituir a los operadores piratas que transportan a los trabajadores a precios exorbitantes”, según un comunicado del Ministerio de Transporte.

El ministro de Transporte, Israël Katz, ha dado instrucciones para que “los palestinos que ingresan a Israel puedan circular en todo transporte público en Israel, incluyendo las líneas que operan en Judea y Samaria (Cisjordania)”, dicta el texto.

“Está muy bien, pero debería haber un autobús cada 10 minutos, porque la espera es larga”, declaró a la AFP Tareq Salameh, uno de los nuevos usuarios, en el paso de Eyal.

Los palestinos de Cisjordania, que deben tener un permiso especial para ingresar a Israel, denuncian frecuentemente un sistema de “apartheid”, que les prohíbe el uso de algunas carreteras y medios de transporte en su propio territorio, oficialmente por razones de seguridad.