Víctimas y defensores de personas que sufrieron abuso sexual de sacerdotes publicaron el miércoles una carta abierta para exigir que el cardenal Norberto Rivera Carrera, número uno de la iglesia católica en México, se abstenga de participar en el cónclave para elegir al sucesor de Benedicto XVI.
Los autores de la carta señalan que el cardenal Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México, encubrió a varios religiosos pederastas, incluido el fallecido Marcial Maciel, fundador de la congregación Legionario de Cristo y acusado de abusos sexuales a menores, así como de mantener una doble vida con dos mujeres y varios hijos.
“Exigimos que el cardenal Norberto Rivera Carrera no participe en el Cónclave que tendrá lugar en el Vaticano” en marzo, señala la misiva firmada por José Barba Martín y Joaquín Aguilar, víctimas de abuso sexual, así como por Alberto Athié, un ex sacerdote luchador por esta causa, y Fernando González, investigador y experto en el caso de Maciel y Los Legionarios de Cristo.
Desde 1997, cuando los abusos de Maciel se destaparon en la prensa mexicana, Rivera Carrera “jamás se ha arrepentido públicamente de sus insultos hacia las víctimas ni, mucho menos, ha reconocido públicamente su responsabilidad como cómplice y protector de Marcial Maciel y de los sacerdotes pederastas”, añade la carta.
Tampoco “ha pedido perdón público a las víctimas por todos los daños prolongados durante años”, indica.
La carta también acusa al cardenal de autorizar el traslado del sacerdote Nicolás Aguilar a Los Angeles, California (EEUU), donde abuso de 26 menores, luego de que violó a varios niños en Tehuacán, Puebla (centro).
La misiva menciona el caso de Carlos López, quien abusó de varios acólitos en una iglesia del sur de la capital, un hecho que Rivera ignoró dejándolo seguir celebrando misas.
Una de las decisiones más emblemáticas de Benedicto XVI durante su papado fue la de obligar en mayo de 2006 a Marcial Maciel, fallecido en 2008, a “renunciar a cualquier ministerio público” y “a retirase a una vida de oración”.
