La Conmebol ratificó este martes la sanción al Corinthians de Brasil de disputar la Copa Libertadores de América 2013 sin el apoyo de su hinchada tanto en su estadio como de visitante, mientras continúa la investigación por la muerte de un menor de edad en Bolivia que involucró a barrabravas de ese club.

De acuerdo con la Cámara de Apelaciones de la Unidad de Disciplina de la Conmebol, la entidad resolvió “desestimar el recurso de apelación interpuesto por Corinthians contra las medidas cautelares adoptada por el Tribunal de disciplina de la Conmebol en su decisión del 21 de febrero pasado, confirmándose la eficacia y ejecutividad de las mismas”.

La sanción, por 60 días, le había sido impuesta en forma temporal -mientras se tramita una investigación- por la muerte de Kevin Beltrán, de 14 años, víctima de una bengala que partió del sector de la hinchada del Corinthians, durante el partido que el cuadro paulista disputó ante el San José de Bolivia en la ciudad de Oruro (Bolivia) hace una semana, por la primera fecha del Grupo 5.

La Confederación Sudamericana había dispuesto que los partidos de local deberá jugarlos a puertas cerradas y cuando sea visitante se prohibirá que se vendan entradas a los aficionados del club brasileño.

Un total de 12 ciudadanos brasileños, hinchas del ‘Timao’, se encuentran detenidos en la ciudad de Oruro, 240 km al sur de La Paz, donde se halla el estadio Jesús Bermúdez, escenario del lance entre los dos equipos por el Grupo 5, que completan el mexicano Tijuana y el colombiano Millonarios.