Un informe de la Superintendencia de Pensiones reveló que el 22% de quienes cotizan en una AFP desde que se creó el sistema en 1981, tienen cerca de 14 años de lagunas previsionales.

Algunos de los factores que explicarían esta cifra son la rotación permanente de trabajos, los períodos importantes de cesantía que sufren algunas personas y los bajos salarios, que hacen que muchos trabajadores prefieran llegar a acuerdos con sus empleadores para alcanzar una mejor remuneración sin cotizar.

Así lo explicó la superintendenta de Pensiones, Solange Berstein, quien además recordó que muchos empleadores declaran el pago de las cotizaciones, pero no las pagan realmente.

Estas cifras se dan a conocer justo cuando se aprobó la idea de legislar la creación de una AFP estatal, propuesta por el diputado Osvaldo Andrade, que plantea al Estado como un actor en este mercado, permitiendo dotar al sistema de mayor equidad.

Dicha iniciativa no convence al Oficialismo, sector que defiende el actual sistema de capitalización individual, inclinándose por mejorar las regulaciones.

Desde el Centro de Estudios Nacionales de Desarrollo Alternativo tienen una mirada más crítica del actual sistema de capitalización individual, el que a juicio del economista de esa institución, Gonzalo Cid, no fue diseñado para dar pensiones sino para entregar dinero fácil a los grandes grupos ecónomcos, propietarios de las AFP.

Cid coincidió con el diagnóstico de la superintendenta de Pensiones, pero dijo que se requiere cambiar el sistema de raíz por medio de un amplio debate, agregando que éste debe ser coherente con el mercado laboral.