Los detenidos sin sentencia en Ecuador, que suman 8.963, sufragaron el viernes de manera anticipada en los comicios presidencial y legislativo de este domingo, para los cuales están convocados alrededor de 11,7 millones de ciudadanos, informó el Consejo Nacional Electoral (CNE).

El organismo instaló juntas receptoras del voto en unas 50 cárceles del país, señaló Roxana Silva, consejera del CNE, mientras su homóloga Nubia Villacís recordó que el sufragio “es obligatorio para los privados de libertad entre 18 y 65 años de edad que no tienen sentencia condenatoria ejecutoriada”.

Las funcionarias acudieron a una prisión para mujeres en Quito, donde sufragaron 85 detenidas bajo el “resguardo de la fuerza pública para salvaguardar la integridad del proceso electoral”, de acuerdo con la viceministra de Justicia, Carmen Simone.

Los votos de los presos quedaron bajo custodia de militares hasta el domingo, cuando serán entregados a los entes electorales provinciales para el escrutinio total, apuntó Villacís.

“Hemos perdido nuestra libertad, pero no nuestra dignidad para elegir y ser elegidos en algún momento”, declaró César Fernández, un exgobernador provincial que está detenido desde 2012 en una penitenciaría del puerto de Guayaquil por presunto narcotráfico y que sufragó ante la mirada de autoridades, periodistas y observadores internacionales.

Cerca de 11,7 de los 15,5 millones de ecuatorianos están convocados para elegir presidente y vicepresidente (en binomio), cinco parlamentarios andinos y 137 asambleístas para el período 2013-2017.

El actual mandatario socialista Rafael Correa, en el poder desde el 15 de enero de 2007, es el favorito para ser reelegido al liderar la intención de voto, según varias encuestas.