Los republicanos del Congreso estadounidense votaron el viernes a favor de prolongar un año más la medida de austeridad que congeló desde 2010 los salarios de dos millones de funcionarios.

En pleno debate sobre la reducción de los déficits, la Cámara de Representantes aprobó por amplia mayoría renovar por un año más el congelamiento de salarios de los funcionarios del gobierno federal, del Congreso y del Ejecutivo, con la excepción de los militares.

Barack Obama congeló sus propios ingresos como funcionario público en 2010, en una época en que el déficit público se ubicaba en 9% del Producto Interno Bruto (PIB). Pero anunció recientemente su intención de descongelarlos el 27 de marzo y de aumentarlos 0,5%.

Esta es el alza prevista que los republicanos quieren bloquear. El Senado debe votar por su parte la medida para que se transforme en ley, pero la mayoría demócrata podría decidir lo contrario.

“Los empleos de tiempo completo y bien pagados no deben estar reservados a quienes tienen la oportunidad de trabajar para el Estado federal”, defendió el republicano Darrel Issa, autor del texto y uno de los millonarios del Congreso.

“No se puede pedir a las familias pagar la factura de los aumentos automáticos en los salarios públicos cuando sus propios salarios se estancan”, agregó John Boehner, presidente de la Cámara.