El orden en la prisión mexicana de Islas Marias, a unos 113 kilómetros de la costa noroeste de México, fue restablecido luego de que unos 650 presos se amotinaron la mañana de este sábado dejando un saldo de cuatro guardias lesionados, informó el gobierno.

“Autoridades de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) restablecieron el orden en el Complejo Penitenciario Islas Marías luego de que a las 09:00 horas (12 horas en Chile) se registró una protesta de internos”, informó la secretaría de Gobernación (Interior) en un comunicado.

Cuatro guardias del penal, que alberga a unos 8.000 internos y que se localiza en un conjunto de islas en el Pacífico mexicano, “resultaron con lesiones leves al tratar de impedir que los internos ingresaran” de un módulo a otro.

El motivo de la protesta, señaló el documento, fue manifestar “diversas inconformidades con algunos de los servicios que se brindan en este centro”, por lo cual se “estableció un diálogo con los inconformes” y regresó el orden.

Según medios de prensa mexicanos, los internos demandaban mejoras en sus condiciones de vida, principalmente en materia de alimentos y horas de esparcimiento.

Este conjunto de islas, de gran riqueza y belleza natural, funciona como penal desde principios del siglo XX. Hasta hace unos años albergaba a unos cientos de prisioneros considerados no peligrosos y que incluso podían llevar a vivir a su familias con ellos. Nunca se han registrado fugas en esta prisión.

En los últimos años, en distintas cárceles mexicanas se han registrado hechos violentos. En el más reciente, el 19 de diciembre pasado, 24 reos murieron en un intento de fuga del penal de Gómez Palacio, en el estado de Durango (norte), que fue clausurado al día siguiente.