Cristián Esquivel, vocero de Aguas Andinas, dio a conocer los motivos por los que como empresa se vieron obligados a dejar sin suministro a cerca de 2 millones de santiaguinos tras el aluvión.

Esquivel explicó se trató de un evento de fuerza mayor que no estaba previsto.

“Las lluvias altas en un lugar donde siempre nieva, y dos aluviones, significó que parte de los cerros se fueran derecho al río”. Esto provocó que el cauce llevara mucho barro y se tornara espeso, por lo que se dio aviso a las plantas y se cerraron para no ser estancadas con lodo, esperando el descenso de la turbiedad del río para empezar a producir agua potable, indicó.

Por protocolo, la empresa tuvo que esperar que las unidades bajaran, pero al ver que no había novedades, se decidió por el corte, primero a 300 mil familias y luego se extendió a 592 mil, ya que resulta imposible el funcionamiento de la planta con el nivel de barro presente, explicó Esquivel.

Tres plantas son las que abastecen a gran parte de la capital, casi al 70%, y están directamente a boca del río Maipo.

La turbiedad bajó durante la mañana de este martes, incluso el complejo más importante de producción de agua, Las Vizcachas, comenzó a operar primero en un 50% y ya en la tarde completó el 100%.

Esto ayudará para que a las 23:00 horas los estanques ya estén llenos y a partir de ese momento, se comience a reponer el servicio, el que debería estar listo a las 6 de la mañana a más tardar.

El suministro de agua se recuperará de acuerdo a la gravedad de cada comuna, en este caso será de Oriente a Poniente.

Escucha la entrevista realizada por Julio César Rodríguez en el programa Podría Ser Peor.