Los arribos y salidas de las máquinas no son anunciadas a través de esas amplificaciones del terminal de buses de Puerto Montt. El administrador del recinto señaló que aquello no se trata de un omisión, sino que de una “decisión”.
Cecilia Vargas acompañó a una familiar al Terminal, ya que ésta debía abordar un servicio que la llevaría al aeropuerto El Tepual, donde a su vez debía abordar un avión. No obstante, el bus tuvo un atraso en su arribo y su salida fue tan abrupta que la pasajera perdió el bus.
Tras reclamar en la respectiva línea, no le brindaron ninguna solución y, por el contrario, le sugirieron que ante la premura del vuelo tomara un taxi. Molesta, reclamó ante la administración del recinto, donde le dijieron que ellos no podían inmiscuirse en el servicio que entregaban las líneas de buses.
Alega que el edificio -que lleva más de dos años en remodelación- debiera anunciar los arribos y las salidas de los buses, algo que en Puerto Montt no ocurre, lamentó.
Al respecto y fuera de micrófono, el admistrador del terminal aclaró que los parlantes del recinto funcionan para entregarle a los usuarios diversas informaciones, como por ejemplo el extravío de personas u objetos, recordatorios de servicios anexos e incluso para anunciar el arribo de los buses con 15 minutos de antelación a las horas estipuladas de llegadas.
Agregó que la Administración del Terminal de Buses decidió concientemente que el arribo y salidas de los buses no sería anunciado, recalcando que la responsabilidad para abordar los buses a las horas programadas es exclusivamente de los usuarios.
Anunció finalmente que a fines del presente mes de enero se instalarán monitores donde se informarán horarios, pero descartó de plano el funcionamiento del clásico locutor anunciador de máquinas, por decisión interna.
