Seis personas fueron masacradas a tiros por desconocidos en la noche de este jueves en Distrito Central, capital de Honduras, por causas aún no determinadas.

Los cuerpos quedaron sobre una acera de una vivienda de clase pobre en la marginal colonia Las Ayestas, en el oeste de la ciudad, donde fueron levantados después del estudio de la escena del crimen por parte del personal de medicina forense del ministerio público.

Según lo señalado por testigos, las personas estaban bebiendo (licor) en la acera frente a la casa, cuando llegaron unos evangélicos a decir que se quitaran de allí porque era peligroso. Estos además señalaron, “aparecieron cuatro individuos con AK-47 y miniuzis y los barrieron a tiros a los que estaban bebiendo y a los evangélicos”.

Los cuerpos de cuatro víctimas quedaron sobre la acera, dos de ellos fueron llevados al estatal Hospital Escuela, este de la ciudad, pero autoridades policiales y hospitalarias informaron que ellas murieron en el trayecto.

Honduras vive una ola interminable de violencia y se acrecienta cada día ante la inoperancia de las autoridades, tanto que Naciones Unidas la ubicó con la tasa más alta de homicidios del mundo, 92 por cada 100.000 habitantes, ante un promedio mundial de apenas 8,8.