Miles de venezolanos empezaban a confluir este jueves frente al Palacio de Miraflores de Caracas para participar en un mitin de apoyo a Hugo Chávez, enfermo en Cuba desde hace un mes, el día en que debía jurar como presidente ante la Asamblea Nacional.

Desde primeras horas de la mañana, cientos de personas salieron a las calles del centro de Caracas entre gritos de “¡Uh, ha, Chávez no se va!” y “Chávez somos todos”.

“El único presidente aquí se llama Hugo Chávez y tenemos que defenderlo cueste lo que cueste”, gritaba un animador subido en una de las tarimas instaladas en la céntrica avenida Urdaneta para arengar a los primeros manifestantes, en su mayoría vestidos con franelas y gorras rojas, el color del oficialismo.

“Si Chávez hubiese venido hoy a ‘juramentarse’ (sic), yo tambien hubiese venido. No cambia nada que no esté. Lo tenemos dentro del corazon”, aseguró a la AFP Luis Brito, de 60, un profesor de derecho que viajó desde Puerto la Cruz (noreste).

La concentración fue convocada también en twitter, con la etiqueta “#YoMeJuramentoConChavez”.

El acto transcurrirá en un ambiente distendido después de que fuese resuelta una agria controversia constitucional, al fallar el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que Chávez no debe ser sustituido y que su gobierno continúa en funciones, lo que fue aceptado por el líder de la oposición, Henrique Capriles.

“Es un día histórico, porque se inicia el mandato del presidente Chávez 2013-2019″, afirmó el miércoles el vicepresidente Nicolás Maduro en alusión al acto de este jueves, al que asistirán los presidentes de Bolivia Evo Morales, Uruguay José Mujica y Nicaragua Daniel Ortega.

En paralelo, este jueves representantes de 22 países de la región participaron en Caracas en una reunión de dos alianzas regionales promovidas por Chávez, la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y Petrocaribe, un convenio de venta de petróleo venezolano en condiciones preferenciales a varios países del Caribe. En una declaración leída por Maduro en ese acto, ambas alianzas ratificaron su “total y absoluta solidaridad” con el presidente venezolano.

Tras la decisión del TSJ, Maduro seguirá ejerciendo la vicepresidencia con los poderes limitados que le transfirió hace un mes Chávez, quien lo designó entonces como su heredero político.

Chávez cuenta con un permiso de la Asamblea Nacional, de mayoría oficialista, para ausentarse del país “todo el tiempo que necesite para atender su enfermedad”. Y el TSJ rechazó que hubiese que declarar la “falta temporal” del presidente -como reclamaba la oposición-, que puede extenderse hasta seis meses y conducir a nuevas elecciones.

Capriles aceptó el fallo “vinculante” del TSJ, pese a tacharlo de una “respuesta a un interés político”, y emplazó a Maduro “a asumir la responsabilidad del cargo que ocupa y gobernar”, tras indicar que el ejecutivo está “paralizado”.

Gobernador reelecto en diciembre del populoso estado Miranda (norte) y que el 7 de octubre perdió las elecciones frente al presidente por 11 puntos de porcentaje, descartó convocar este jueves a la oposición a una manifestación paralela.

“No estamos aquí buscando ninguna confrontación ni poniendo a venezolanos a pelear unos con otros”, dijo Capriles.

Con un “¡Hasta la vida siempre!”, Chávez se despidió hace un mes de los venezolanos al partir a Cuba para operarse por cuarta vez contra un cáncer. Desde entonces, el mandatario, que durante 14 años de gobierno estuvo presente casi a diario en las pantallas de televisión, no ha sido visto ni escuchado por sus compatriotas.

Su estado es “estacionario”, luego de sufrir una insuficiencia respiratoria provocada por una “severa infección pulmonar”, según el último parte divulgado el lunes por el gobierno.

Maduro, que calificó el fallo del TSJ de “veraz, apegado a las leyes de la República”, indicó que conversó telefónicamente con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que no participará en el acto ante Miraflores.

Según Maduro, Rousseff ratificó “toda su confianza en el desarrollo de la democracia venezolana”, tras conocer la sentencia del TSJ.

“Estamos muy contentos” por la decisión del Tribunal “que le lleva paz, tranquilidad y sosiego a todo el pueblo de Venezuela”, se felicitó por su parte el jefe del Comando Estratégico Operacional de las Fuerzas Armadas, Wilmer Barrientos.

Barrientos informó el miércoles que el ejército reforzó los puestos fronterizos para llevar “esa sensación de paz que requiere el pueblo venezolano”.