El Hospital de Coronel realizó un cambio general de sus calderas de calefacción, en una iniciativa que se enmarca en el plan de compensación de la termoeléctrica Santa María de Colbún. Esto reducirá las emisiones contaminantes en casi el 100%.

Desde 1959, año de inauguración del Hospital San José de Coronel, que las calderas de eliminación de desechos y la calefacción se operaban en base a carbón, generando emisiones del orden de las 27 toneladas de material contaminante.

54 años más tarde se genera un cambio cualitativo en esta materia, con la instalación de dos calderas térmicas que operan con diesel y gas, lo que reduce en el 99,2% las partículas nocivas para la salud.

Todo esto fue posible gracias al Complejo Termoeléctrico Santa María de Colbún. No por filantropía, sino que en el marco de un compromiso para la resolución de calificación ambiental por la Ley de Compensaciones, que el gerente general de Colbún, Ignacio Cruz, insistió, en que es su forma de vinculación con la comunidad.

La Seremi de Medio Ambiente, Marianne Hermman, señaló que esta iniciativa permitirá no sólo compensar las emisiones de Colbún, sino que la llegada de nuevos proyectos.

Esto no sólo significará un cambio para la comunidad, sino que también para quienes operan estas calderas. Así lo explicó, Juan Arias, quien ya dejará de trabajar con palas en la utilización del carbón.

Por su parte, el director del Servicio de Salud, Carlos Vera, explicó que la contaminación no sólo es un tema de las empresas.

Así llega a su fin la nube de humo que regularmente dejaba ver el Hospital de Coronel; su característica chimenea negruzca y hollinosa pasó a la historia.