El sindicato de trabajadores de la empresa Quillayes de Futrono retomó sus labores, mientras los operarios desvinculados firmaron este miércoles su finiquito.

El presidente del sindicato de trabajadores, Patricio Troncoso, explicó que los empleados firmaron los finiquitos ofrecidos por la industria, ya que finalmente no fue posible llegar a un acuerdo compensatorio por el despido sorpresivo.

El dirigente además señaló que 16 empleados serán recontratados por un mes para faenar los productos que quedaron en la planta, y otros diez serán contratados posteriormente para realizar el desmantelamiento de la recién cerrada planta de lácteos.

El abogado Patricio Miranda, quien los asesoró durante los últimos diálogos con la empresa, explicó que los trabajadores analizan la presentación de una demanda por despido injustificado, reclamación legal que, de ser decretada así por los tribunales, los operarios desvinculados podrían optar a una indemnización de un 30% de su finiquito.

Por su parte el gobernador del Ranco, Eduardo Hölck, señaló que su repartición está completamente abierta a planificar una reunión para dialogar y escuchar las inquietudes de los trabajadores, que el sábado 04 de enero se reunieron con representantes del Partido Socialista.

Para la autoridad provincial, el conflicto se politizó y dejó todo en fojas cero.

Los trabajadores señalaron, respecto a los dichos de abandono por parte del Gobierno, que esta actitud habría sido tomada por la priorización de asuntos que deben resolver y no con la intención de evadir las conversaciones con ellos.