Francisco Javier Gil, director de la cátedra Unesco de Inclusión en la Educación Superior de la U. de Santiago, aseguró que tras la incorporación del ranking de notas se “redujo la brecha” en el área.

El ministro de Educación, Harald Beyer, afirmó cuando se aprobó la medida en junio del 2012 que esto sólo beneficiaría a los colegios particulares.

No obstante, los resultados demostraron que “el ministro de Educación se equivocó, y podemos decirle al país que la inclusión del ranking redujo la brecha”, sostuvo Gil.

Esto porque cerca del 89,3% de los 74 mil alumnos que se beneficiaron con la iniciativa son de establecimientos subvencionados y no privados.

El experto indicó que “se logró la meta esperada”. Las cifras dieron a conocer que del total de estudiantes favorecidos, 9,6% (7.140) lograron alcanzar el tramo máximo, de 101 a 150 puntos de bonificación. De éstos, 2.086 son de liceos municipales.

“Este ranking funciona porque los talentos están repartidos igualmente entre pobres y ricos”, sentenció Gil.

Recordemos que el ranking de notas entrega un beneficio extra a aquellos estudiantes que se ubican en el lugar más alto de calificaciones de su promoción, otorgándoles entre 1 y 150 puntos.