El fiscal general de Arizona propuso un proyecto que permitiría al director de cada escuela, o a otro empleado designado, portar armas en la institución tras recibir entrenamiento de parte de la policía local.

El plan surgió en respuesta a la masacre en la localidad de Newtown, Connecticut, donde hace dos semanas un joven mató a 20 niños y 6 mujeres antes de suicidarse.

El fiscal general del estado, Tom Horne, señaló que el objetivo de su proyecto es que “cualquier escuela que lo desee pueda designar al director, o a algún otro empleado, para que reciba entrenamiento en el uso de armas de fuego y en la gestión de emergencias como la que ocurrió en Newtown”.

“La solución ideal sería que haya un policía en cada escuela”, prosiguió Horne en el comunicado divulgado el miércoles, en el que aclara que la participación de las escuelas sería voluntaria y gratuita.

Pero, como esto no sería económicamente viable, “la siguiente mejor solución es que en la escuela haya una persona entrenada en el manejo de armas y en la gestión de emergencias, que posea un arma de fuego en un lugar seguro”.

El proyecto tiene la aprobación de varios alguaciles y del líder de la Cámara baja del estado, el republicano David Gowan, quien introducirá la propuesta de enmienda, agregó el texto.

Paul Babeu, alguacil del populoso condado de Pinal, dijo al canal local ABC Arizona que él iría incluso más lejos y buscaría entrenar a varios educadores por escuela en el manejo de armas.

De acuerdo a ABC, por el momento sólo Utah y Kansas permiten el porte de armas en escuelas.