Unicef, la agencia de Naciones Unidas para los niños, pidió este miércoles a Rusia no prohibir las adopciones internacionales, luego de que el parlamento aprobase una ley que prohíbe a estadounidenses adoptar a niños huérfanos rusos.
El director ejecutivo de Unicef, Anthony Lake, exhortó a que el gobierno se asegure de que la “actual situación apremiante de muchos niños rusos en instituciones recibe atención prioritaria”.
“Apelamos al gobierno a establecer un amplio plan de protección social nacional para ayudar a reforzar las familias rusas. Las alternativas a la colocación de niños en instituciones especiales son esenciales, entre ellas familias de acogida, adopciones domésticas y adopciones internacionales”, dijo Lake en un comunicado.
Lake publicó su comunicado luego de que la cámara alta del parlamento ruso aprobara una ley que prohíbe a los estadounidenses adoptar niños rusos. La propuesta, redactada como represalia a una ley estadounidense que sanciona a los oficiales rusos implicados en la muerte en prisión del abogado Sergei Magnitsky en 2009, debe ser promulgada por el presidente Vladimir Putin para entrar en vigor.
La ONU afirmó que el bienestar de los niños no debería ser un asunto político.
“Pedimos al gobierno de Rusia, que en el diseño y desarrollo de todos los esfuerzos para proteger a los niños, deje que el mejor interés de los niños – y sólo el mejor interés- determine sus acciones” afirmó Lake.
