Un menor de 12 años, indentificado como Rodrigo Cabrías, falleció tras caer a un pozo de agua en la comuna de Romeral, región del Maule.

Rodrigo, en compañía de familiares, participaba de una jornada de casería cuando cayó a un pozo de diaz metros de profundidad.

El niño habría estado tratando de sobrevivir por varios minutos a la espera del equipo de rescate de Bomberos, hasta morir en el pozo.

Previo a la llegada de Bomberos, la familia trató de sacarlo de la fondo pero no lo consiguieron ya que no contaban con ningún cordel ni elemento que llegara hasta la profundidad en que se encontraba el niño. Incluso, en el intento desesperado por rescatar a Rodrigo, amarraron ramas de eucalipto para llegar, pero no alcanzaron.

Producto de la caída, el joven habría quedado en estado de inconsciencia falleciendo inevitablemente.

Respecto a la cuestionada labor de Bomberos de Romeral, éstos respondieron que están capacitados para atender este tipo de emergencias y no era necesario haber llamado a sus colegas de Curicó. Destacando también la tardanza de los familiares al momento de pedir ayuda.

El dueño del recinto queda exento de cargos, ya que se trata de un lugar privado donde personas acostumbran a entrar sin autorización a practicar actividades como la caza.