Tras la conmoción inicial provocada por la masacre de Newtown donde murieron cerca de 30 personas, la mayoría de ellos niños entre los 5 y 10 años de edad, ya comienzan a escucharse las primeras propuestas respecto de cómo frenar los devastadores ataques a escuelas que EEUU ha sufrido en los últimos años.

Y sin duda una de las más polémicas es “Un arma en cada sala“, petición ingresada este viernes por ciudadanos de la nación del Norte, donde solicitan que tanto directores como profesores de las escuelas nacionales sean armados y entrenados en el uso de las mismas.

“Si los profesores y los directores son armados y entrenados para defenderse durante un ataque a una escuela, entonces habrá menos bajas e intentos de irrumpir en ellas. Es un hecho que las tasas de criminalidad se reducen cuando la gente está mejor armada”, asegura la petición, originada en el estado de Washington.

Cabe consignar que el sitio “We the people” es el lugar abierto por la Casa Blanca para que la gente envíe sus ideas de cómo mejorar la nación. Si una iniciativa obtiene más de 25.000 firmas en un mes, el Gobierno se compromete a examinarla y entregar una respuesta formal.

Hasta el momento, la iniciativa para armar a los docentes de los establecimientos educativos va bien, con más de 2.000 firmas reunidas en menos de 24 horas. La solicitud tiene plazo hasta el 13 de enero para llegar a la meta de 25 mil rúbricas.

“Es tiempo de darle a nuestros profesores la capacidad de defenderse a sí mismos y dejar de pretender que un botón de alarma es suficiente defensa. Demos un paso al frente por la seguridad en las escuelas: armemos a los directores y profesores hoy mismo. Un arma en cada sala de clases protegerá a nuestros estudiantes de las masacres como la que sufrimos este viernes en Connecticut.