El presidente venezolano, Hugo Chávez, se encuentra “en condiciones estables” horas después de iniciado el “complejo” proceso postoperatorio tras la intervención contra el cáncer que se le practicó el martes en Cuba, informó este miércoles por la noche el gobierno venezolano.

“A esta hora el parte médico indica que el paciente se encuentra en condiciones estables, en su proceso evolutivo”, dijo el ministro de Comunicación e Información, Ernesto Villegas, en un mensaje de radio y televisión de transmisión obligatoria.

“Realizada la compleja y delicada intervención quirúrgica, el paciente se encuentra en un proceso postoperatorio igualmente complejo”, agregó el ministro al leer el escueto comunicado.

Villegas explicó que “acompañan al presidente Chávez sus familiares más cercanos, quienes desde La Habana agradecen las expresiones de solidaridad” e instó a los venezolanos a confiar “en la fortaleza física y espiritual del comandante Hugo Chávez y en el tratamiento médico”.

Se trata del segundo comunicado leído por el gobierno este miércoles, después del vicepresidente Nicolás Maduro, en el que advirtió que el proceso postoperatorio del mandatario será “complejo y duro” y pidió a los venezolanos estar “preparados” y “unidos” en estos días “difíciles”.

Chávez, de 58 años, que el 10 de enero debe reasumir la presidencia tras ser reelecto en octubre, fue sometido el martes a una “compleja” operación de más de seis horas, la cuarta desde que le fue detectado un cáncer a mediados de 2011, del que se desconoce su ubicación.

El mandatario se ha tratado casi exclusivamente en Cuba, alejado de los medios de comunicación y bajo la seguridad cubana.

Maduro, nombrado heredero político por Chávez en caso de que quede “inhabilitado” para ejercer la presidencia, agradeció el apoyo del régimen cubano, gran aliado de Chávez.

El mandatario “¡está siempre junto a Fidel Castro y Raúl Castro, siempre juntos!”, exclamó, afirmando que también los ministros venezolanos están yendo y viniendo de La Habana para acompañar al presidente.

Una solemne misa por la salud de Chávez se celebró en la tarde del miércoles en el complejo militar de Fuerte Tiuna en Caracas, a la que asistieron las principales figuras del chavismo y centenares de miembros de las Fuerzas Armadas.

“A los patriotas, a los que queremos patria, debemos estar unidos. A los que queremos a Chávez debemos respetar la palabra del comandante, cumplir las órdenes”, arengó tras la oración el número dos del gobernante PSUV, el exmilitar Diosdado Cabello, dirigiéndose a las militares.

Antes de partir a Cuba, Chávez, que ha tratado de fidelizar el ejército a su gobierno, alertó a la cúpula militar de eventuales planes para desestabilizar el país en su ausencia.

Muchos venezolanos siguieron manifestando el miércoles su cariño y apoyo al presidente en oraciones que se multiplicaron por todo el país.

“Lo estamos esperando presidente, no demore, el pueblo lo necesita”, se leía en una sábana gigante colocada en una céntrica plaza caraqueña, en la que centenares de seguidores escribieron mensajes de solidaridad.

La televisión oficial retransmitía continuamente spots elogiando los logros de Chávez en 14 años de gobierno y otros videos, como el documental “De Bolívar a Chávez”.

Chávez no adelantó ninguna fecha de regreso al anunciar el pasado sábado esta nueva intervención “imprescindible” contra el cáncer.

Pero admitió la posibilidad de quedar “inhabilitado” para ejercer la presidencia, incluso antes del 10 de enero, por lo que designó por primera vez a su heredero político, Maduro, de 50 años.

En ese caso, el mandatario explicó que el vicepresidente asumiría la presidencia temporal hasta que se convocaran elecciones, en las que sería también el candidato oficialista.

La Constitución establece que en caso de falta absoluta del presidente antes de la toma de posesión, deberán celebrarse elecciones en un plazo de 30 días.

Según dijo a la AFP el abogado constitucionalista Raúl Arrieta, la fecha del 10 de enero “no se puede postergar” y la asunción de poderes “tiene que ser en Venezuela”.

Para el politólogo John Magdaleno, la incertidumbre en que está sumida Venezuela abre un período de inestabilidad política, con “muchos interrogantes sobre el control de las decisiones en el gobierno”.

“Una cosa es la designación oficial de Maduro y otra cosa muy distinta son las dinámicas internas que se producen dentro del oficialismo. Otros pesos pesados del chavismo (…) querrán tener influencia en las decisiones”, dijo Magdaleno a la AFP.

Sobre los detalles de la operación, Maduro dijo únicamente que fue una “intervención quirúrgica correctiva de la lesión que reincidió en el mismo lugar de las antiguas lesiones”.

La enfermedad de Chávez ha sido tratada como un secreto de Estado, a diferencia de otros casos de presidentes que también han sufrido cáncer, como el colombiano Juan Manuel Santos o el exmandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quienes publicaron sus informes médicos.

La del martes fue la primera vez que el gobierno venezolano informó en directo, del inicio, el desarrollo y la culminación de una intervención quirúrgica de Chávez.

El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, aseguró la tarde del miércoles que el mandatario está “bien” a pesar de “lo difícil de la operación”.

La recaída de Chávez coincide con la campaña para las elecciones regionales del domingo. El oficialismo gobierna en la mayoría de los 23 estados y aspira a conquistar los feudos opositores para acelerar su proyecto socialista.

En varios estados del país, los candidatos oficialistas se refirieron este miércoles en sus mitines a la salud de Chávez y pidieron una victoria “perfecta” para apoyar la recuperación del mandatario, como hizo Adán Chávez, hermano de Chávez y gobernador de Barinas (oeste), el estado natal de la familia.

Maduro también pidió el martes un voto “de amor” por Chávez en los comicios, algo que no escapó a la críticas de la oposición.

“Lo que le está pasando al presidente, ¿qué tiene que ver con la elección?”, criticó el líder de la oposición y candidato a la reelección a la gobernación de Miranda (norte), Henrique Capriles.