La delegación chilena en La Haya comenzó a trabajar para lograr pronosticar los argumentos que presentará Perú en la audiencia de este martes.

En esta sesión, la delegación peruana tendrá una doble tarea. Por una parte, responder al centenar de evidencias que revelaron los juristas que representaron a Chile, donde destacó la omisión y adulteración de documentos de la contraparte.

Y por otra parte, deberán responder al juez marroquí Mohamed Bennouna, quien, al finalizar la primera semana de alegatos, preguntó a ambas delegaciones si en la época el derecho internacional les permitía firmar un tratado de mar territorial, con soberanía, como el de 1952.

La interrogante está dirigida al punto central del litigio que es la validez o no de este tratado, que defieden Chile como el acuerdo que estableció el paralelo como frontera marítima con Perú y Ecuador, pero que la contraparte en la Haya lo califica como un mero pacto pesquero.

Por lo anterior, la delegación peruana ha estado trabajando a puertas cerradas en el hotel Hilton, incluso no se permitió el ingreso de medios de comunicación.

Chile deberá responder al juez marroquí el viernes 14, cuando presente su duplica oral, así que el trabajo en el hotel Carlton de los juristas y asesores ha sido más tranquilo.

El contenido de la exposición chilena será definido el miércoles, tras conocer el tono de los alegatos peruanos, que se prevén más agresivos.

En caso que el agente peruano Allan Wagner cierre la fase oral, la contra parte chilena hará lo mismo con Van Klaveren.

Mientras que en Santiago, el ex canciller, presidente de la DC y senador Ignacio Walker, ante la pregunta del juez marroquí, reconoció que no habían antecedentes en el derecho internacional, ya que Chile, Perú, Ecuador y Colombia, fueron los pioneros en la protección de la zona económica.

Para el Director del programa de Relaciones Internacionales de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, José Rodríguez Elizondo, la respuesta es simple.

En tanto, la senadora Soledad Alvear, ex canciller durante el gobierno de Ricardo Lagos, evaluó positivamente el trabajo de la delegación nacional y llamó a mantener un tono firme, pero sin estridencia.

Además, uno de los asesores que se encuentra en la Haya, el abogado Andrés Jana, le restó dramatismo a una definición de la Corte Internacional de la Justicia, destacando que el caso es sólido para nuestro país.

Está mediamente claro que este martes, Perú deberá hacer frente a las omisiones denunciadas por Chile, ahondará en algunas contradicciones de nuestras autoridades, como el informe del asesor jurídico de nuestra Cancillería, Raúl Bazán, que en 1964 reconoció que el punto de partida de la frontera marítima no estaba definido y tratar de aislar el tratado de 1952 intentando demostrar que los otros suscritos, como Ecuador, no lo interpretaron como un acuerdo de límites, sino como un pacto de defensa de los recursos del mar.