La justicia de México liberó este domingo a 56 de los 69 detenidos el 1 de diciembre durante la protesta contra la asunción del presidente Enrique Peña Nieto, informó a la AFP un abogado cercano al caso, actualizando un saldo precedente de 53 liberados.

“Se quedan en el juzgado 13 personas, 12 hombres y una mujer”, a los que la jueza María del Carmen Mora dictó órdenes de prisión, informó a la AFP Juan de Dios Hernández, miembro de la “Liga de abogados 1 de diciembre”, formada a raíz de los hechos de aquel sábado.

“Todos los demás (56 personas) fueron liberados”, precisó el letrado desde el Reclusorio Norte de Ciudad de México, donde decenas de personas realizan un plantón para exigir la liberación de todos los presos vinculados al caso.

Horas antes, el también abogado Sergio Soto había dado a la AFP un saldo preliminar de 53 liberados.

Las 13 personas que recibieron órdenes formales de prisión enfrentan cargos por ataques a la paz pública, un crimen cuya pena en México fluctúa entre cinco y 30 años de cárcel.

“A los que dejaron (en la cárcel) los tienen como pagadores para tratar de justificar ante la opinión pública nacional e internacional un operativo de corte fascista como el que hicieron” las autoridades mexicanas el 1 de diciembre, arremetió Hernández.

La protesta contra la asunción de Peña Nieto degeneró en los alrededores del Palacio Legislativo cuando personas armadas con cohetes y cócteles Molotov se enfrentaron con policías federales, quienes respondieron con gas lacrimógeno y, según dijo un paramédico a la AFP, incluso con disparos de balas de goma.

Además de esos enfrentamientos, un grupo de personas dañó inmuebles del centro de la ciudad causando pérdidas millonarias. Fue en ese lugar donde la policía capitalina detuvo a 96 personas, de las cuales 69 seguían presas hasta este domingo antes de que se iniciaran las liberaciones, según cifras de la fiscalía de Ciudad de México.

Sin embargo, la Comisión de Derechos Humanos de esa urbe dijo el jueves que eran 70 las personas arrestadas.

El abogado Soto aseguró que el fotoperiodista rumano Mircea Topoleanu fue puesto en libertad, aunque no precisó la situación de su colega mexicano Brandon Daniel Bazán, también detenido.

La ONG Reporteros sin Fronteras condenó el martes la “represión” policíaca el día de la protesta y denunció el arresto de los comunicadores que cubrían los hechos.

El sábado, familiares y abogados de los detenidos, así como un grupo de personas arrestadas momentáneamente el 1 de diciembre, exigieron una “disculpa pública” del gobierno de la Ciudad de México por la “arbitrariedad” y “violencia” con que, aseguran, actuó la policía.

Pese a que medios locales publicaron fotografías y videos en los que aparecen policías disparando armas compatibles con balas de goma, el encargado del despacho de Seguridad Pública federal, Manuel Mondragón, y el secretario de Gobernación (Interior), Miguel Ángel Osorio Chong, negaron el uso de ese armamento.