En su primera actividad en terreno, la alcaldesa de Hualpén Fabiola Lagos, puso énfasis en su labor continuadora de la gestión anterior. En la oportunidad negó problemas al interior del PPD, luego de la señal que otorgara la dirigencia regional, al restarse del traspaso de mando del sillón edilicio.

Autodenominada como la figura más importante que tiene el PPD en la región, la nueva jefe comunal inició su mandato en terreno, visitando la población La Perla del Bío Bío. Allí recorrió las viviendas de los habitantes hualpeninos para hacer entrega del Pase del Adulto Mayor, casa por casa.

Lagos hizo hincapié en la continuidad, una defensa corporativa de la gestión encabezada primero por Marcelo Rivera y luego su hijo Miguel, en el municipio, ambos cuestionados en la justicia ad portas de un proceso por corrupción pública que se inicia en marzo.

Respecto a los conflictos internos en el PPD, Lagos apuntó en su discurso de traspaso de mando -el jueves- a aquellos que estuvieron junto al círculo cercano de los Rivera, al cual pertenece y aquellos que se marginaron de a poco.

Hoy negó que haya sido una referencia al presidente regional del PPD, Rodrigo Daroch, y su padre, renunciado hace dos días como jefe de gabinete del municipio. Ambos no asistieron al acto de ascenso.

En la primera actividad pública, los vecinos valoraron el actuar de la alcaldesa:

El lunes será el momento de reuniones junto a sus cercanos, donde Fabiola Lagos seguirá definiendo a sus colaboradores en cargos de confianza.

En ese sentido, ya confirmó a Lautaro Benítez, ex secretario regional del PPD, como director jurídico; a Miguel Peña como administrador municipal; y Miguel Rivera como Dideco. Estos dos últimos acusados por el Ministerio Público en el caso Hualpén.