Chelsea, vigente campeón de Europa, puede quedar este miércoles eliminado a las primeras de cambio siempre que la Juventus consiga, al menos, un empate en su desplazamiento a Kiev, algo que no parece difícil teniendo en cuenta que el Shakhtar Donetsk ya está clasificado.
El equipo ucraniano tiene 10 puntos en la clasificación del grupo E y un empate le sirve para pasar como primero de grupo. La Juventus tiene nueve puntos y el Chelsea 7, por lo que al equipo italiano le sirve el empate para pasar a octavos de la máxima competición continental.
El club londinense, que enterró prácticamente todas sus opciones al perder hace 15 días contra la Juventus por 3-0, está a la espera de un milagro que, viendo sus resultados desde que Rafael Benítez se ha hecho cargo del equipo, sustituyendo a Roberto Di Matteo, parece improbable teniendo en cuenta que a Shakhtar y Juventus les sirve el empate para lograr sus objetivos.
Dos empates (a cero goles) y una derrota es el balance de Benítez desde que se hizo cargo del Chelsea, cuya afición tampoco olvida su pasado como entrenador del Liverpool.
Seguramente, la mente de los jugadores del Chelsea estará más pendiente de Tokio que de Ucrania, ya que dentro de una semana estará disputando el Mundial de Clubes en el país asiático, un título que el equipo londinense no tiene en sus vitrinas y que podría dar algo de aire a Benítez para lo que resta de temporada.
