La embajada de Ecuador en Londres publicó este jueves, una clarificación sobre la salud del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, refugiado desde hace más de cinco meses en esa legación, afirmando que “no padece ninguna afección médica urgente”.
La embajadora de Ecuador en Londres, Ana Albán, declaró a los periodistas en Quito, que el australiano de 41 años “tiene una afección crónica en el pulmón que podría agravarse en cualquier momento”.
Sin embargo, un comunicado difundido el jueves en la página web de la embajada, precisa que Assange no padece ninguna afección médica urgente.
Las autoridades ecuatorianas aprovecharon la instancia para pedir nuevamente al gobierno británico que garantice la asistencia humanitaria que en un futuro pudiera necesitar Julian Assange, respetando la protección brindada por Ecuador.
El ministerio británico de Relaciones Exteriores declaró no haber sido puesto al corriente de que Assange padeciera alguna dolencia.
“El gobierno ecuatoriano no nos ha informado de que el señor Assange esté enfermo…Plantearon inquietudes sobre lo que ocurriría si el señor Assange requiriera atención médica (…).Las autoridades británicas no buscarían de ninguna manera impedir que el señor Assange recibiera consejo o atención médica. Se lo hemos dicho claramente al gobierno de Ecuador”, indicó un portavoz
Assange se refugió el pasado 19 de junio en la embajada de Ecuador -país que le concedió asilo el 16 de agosto -para evitar una inminente extradición a Suecia. La justicia lo reclama para interrogarlo como sospechoso de cuatro delitos sexuales de los que no ha sido acusado.
El activista teme que el fin último sea entregarlo a Estados Unidos, donde podría ser condenado a pena de muerte por haber revelado decenas de miles de documentos confidenciales de su gobierno a través de WikiLeaks. Aún continúa la espera de un salvoconducto o de una garantía de que no será extraditado posteriormente a Estados Unidos.
“Continuamos buscando garantías por parte de los gobiernos de Reino Unido y Suecia que permitan a Assange una vida normal, libre de los temores de extradición a Estados Unidos”, concluyó el comunicado de la embajada de Ecuador.
