Un emplazamiento a los Secretarios Regionales Ministeriales y al Intendente, a exigir un Estudio de Impacto Ambiental para el proyecto Pirquenes, realizó la ex intendenta del Bío Bío Jacqueline van Rysselberghe, al momento de repetirse la votación este verano.

La coalición gobernante está dividida ante el proyecto termoeléctrico Pirquenes, que pretende instalarse con una importante oposición ciudadana en Laraquete y cuya tramitación judicializada se extiende en el tiempo.

Esto luego que la Corte Suprema ordenara celebrar una nueva votación en la Comisión Ambiental Regional, lo que la ex intendenta Jacqueline Van Rysselberghe, consideró una buena noticia, en coincidencia con su posición inicial cuando encabezaba la región como máxima autoridad.

Asimismo, en clara disidencia del actuar del gobierno regional, cuyo Intendente Víctor Lobos defiende el proyecto, su antecesora emplazó derechamente a las partes a exigir un estudio de impacto ambiental, junto con llamar a la empatía de las autoridades, respecto de los vecinos de Laraquete.

La inversión de Pirquenes considera 80 millones de dólares con producción estimada de 50 megawats de energía, tamaño de proyecto que en Chile no considera Estudio de Impacto Ambiental como lo promueve la comunidad aledaña y algunas autoridades, entre ellas también parlamentarios de la zona, como el senador de la UDI Víctor Pérez, contrario al actuar del Gobierno en este proceso.

Mientras que en enero deberá repetirse la votación, Medio ambiente, Salud y Agricultura ya se habían pronunciado contrarios al proyecto sin la realización de un Estudio de Impacto Ambiental de por medio, en una correlación de fuerzas que esta vez podría variar de existir en los próximos días salidas del gabinete regional en éstas u otras carteras.