Con el abrazo entre el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, y la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, se selló el acuerdo entre los 14 gremios que componen la mesa del sector público y el gobierno por reajuste salarial.

Un reajuste general del 5% para las remuneraciones del sector público fue el acuerdo definitivo tras un mes de negociaciones, en donde incluso se desarrollaron jornadas de protesta.

Un 8,5% era el reajuste que solicitaban los trabajadores versus un 4% que propuso el Gobierno. Sin embargo, este pacto se selló con la firma de un protocolo que establece mesas de trabajo y propone mejoras en 11 puntos, tales como seguro de cesantía, asignación, viáticos, cuidado infantil, permiso postnatal parental, trabajo decente, regulación de honorarios, bono de zona extrema, libertad sindical y cobertura de reajuste.

La Ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, valoró el acuerdo alcanzado, pues se logró en base al diálogo y al respeto mutuo.

En la misma línea, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, afirmó que la firma de este protocolo marca un precedente para todos los trabajadores del país, sin excluir a quienes ejercen sus labores en el sector privado.

El reajuste salarial ingresó con suma urgencia para su debate en el Congreso. En ese sentido, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín aseguró que se espera una rápida tramitación legislativa, para que este beneficio comience a regir desde el mes de diciembre.

Durante esta jornada, el reajuste ya fue aprobado por la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, por lo que a esta hora se está debatiendo por el pleno de esta instancia. El presidente de esta comisión, el UDI Ernesto Silva, valoró la capacidad de diálogo del Gobierno.

Además del reajuste general del 5%, tras la negociación se acordó un bono de vacaciones de 60 mil pesos para los sueldos más bajos y de 40 mil pesos para los salarios más elevados. Así como también un bono de término de conflicto de 185 mil pesos y reajuste de 5,3 % en los beneficios, como aguinaldos y otras asignaciones.