Un sector de los pescadores artesanales, representado por la Conapach, manifestó su apoyo a la gran industria y se opuso a las licitaciones de parte de las cuotas en la bullada Ley de Pesca.

La semana pasada el Senado finiquitó que las licencias para pescar se entregarían a las grandes empresas por 20 años renovables y ahora se discute el resto de la polémica normativa.

A la obvia oposición de los industriales a que se licite hasta el 15% de su cuota, este martes se sumó un apoyo inesperado desde un sector de los pescadores artesanales, la Conapach, que liderados por Soila Bustamante se opuso a las licitaciones.

Argumentan que si se perjudica a la industria, licitando parte de su cuota, la medida va a repercutir en ellos, ya que aseguran, que en varias regiones del país, las grandes empresas ceden parte de su cuota para luego comprarles su producción.

En la UDI no hay aún un consenso al respecto, ya que el acuerdo entre el gobierno y la Democracia Cristiana que destrabó el avance del proyecto la semana pasada, estableció que se debe licitar sí o sí, para permitir el ingreso de nuevos actores.

Mientras que en la Concertación sigue la división por dicho acuerdo, sin embargo, el presidente de la DC Ignacio Walker negó fraccionamientos y aseguró que también hay senadores socialistas que se sumaron a las tratativas con el Ejecutivo.