Sao Paulo, la capital económica de Brasil, presentó este jueves en París su candidatura para convertirse en la sede de la Exposición Universal de 2020, un evento planetario que tiene lugar cada cinco años.
Una comitiva del gobierno brasileño, presidida por el canciller Antonio Patriota, defendió el proyecto ante la organizadora de la feria, la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE, en francés), en una asamblea en la sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en París.
Para la campaña de la metrópoli latinoamericana para acoger esa feria -un evento multitudinario que, en términos de impacto económico y mediático sólo es superado por las Olimpiadas y la Copa del Mundo- viajaron a París el gobernador del estado de Sao Paulo, Geraldo Alckim, el alcalde saliente Gilberto Kassab y el recién electo Fernando Haddad.
Sao Paulo prevé invertir 4,4 billones para la construcción de un centro de convenciones en un terreno de cinco millones de metros cuadrados, anunció el equipo del gobierno brasileño en París.
La candidatura de Sao Paulo, con 11 millones de habitantes, será también defendida por los secretarios del Estado Sidney Beraldo y Edson Aparecido, que representarán al gobierno paulista ante el BIE, compuesto por 161 países, que decidirán el año próximo qué ciudad será la sede de la próxima Exposición Universal.
El tema de la Feria en el 2020 será “Poder de Divesidad-Armonía del Crecimiento”. Compiten para acoger el evento otras cuatro ciudades: Esmirna, en Turquía, Ekaterinburgo, en Rusia, Dubai, capital de los Emiratos Arabes Unidos, y Ayuthaya, en Tailandia.
La sede vencedora será anunciada en noviembre del 2013.
