El presidente de Bolivia, Evo Morales, triplicó su patrimonio desde que llegó al poder en 2006, porque ahorra hasta un 100% de su salario de unos 15.000 bolivianos, unos 2.155 dólares, y sus bienes se valorizaron, dijo este jueves el vicepresidente Alvaro García.

“El presidente tiene un salario de 15.000 bolivianos que en verdad casi ni lo gasta (…) la mayor parte de su salario, yo diría de un 90 a un 100%, queda como ahorro”, afirmó García durante una conferencia de prensa, en la que habló sobre este y otros temas.

El gobierno boliviano confirmó a principios de mes que Morales, un indígena de tendencia izquierdista, tiene en la actualidad un patrimonio neto de 2,7 millones de bolivianos, unos 388.000 dólares, y que en 2006 sus bienes físicos y financieros eran de 779.000 bolivianos, unos 111.900 dólares.

La declaración jurada de bienes es una obligación que deben cumplir todos los funcionarios públicos ante la oficina gubernamental de la Contraloría General de la República, una instancia que fiscaliza lo referido a los gastos estatales.

García señaló que Morales, que de niño fue criador de animales auquénidos y de joven músico trompetista y campesino cocalero, no gasta su salario, “pues recibe el alimento” en el presidencial Palacio Quemado y cuando viaja es objeto de invitaciones de sus anfitriones.

También dijo que Morales recibe “regalos, que no tienen nada que ver con la obtención de favores personales”. El propio presidente había dicho el pasado fin de semana que su patrimonio subió, con los “ponchos” de lana que le regalan y que -según él- cada uno debe valer unos 200 dólares.

García mencionó entre los bienes revalorizados del mandatario “una pequeña casa y dos lotes de terreno” en el país.

“Ahorro de salarios, más valorización de sus bienes e inmuebles: se justifica con creces el incremento del patrimonio del presidente y a eso se suman los regalos, que no tienen nada que ver con la obtención de favores personales”, agregó el vicepresidente.

La oposición de derecha había cuestionado al presidente por el aumento de su patrimonio desde que está en funciones.