Un trágico final tuvo el paseo que un grupo de adultos mayores hizo al centro turístico El Edén de Quillota, cuando una mujer de 78 años, identificada como Lucinda Fuentes, paciente de la Casa Alzheimer de Quilpué, se extravió en el parque y fue encontrada muerta en un canal que atraviesa el sector de El Boco.
Según las primeras indagaciones, la anciana se separó del grupo luego de almorzar y cuando el único funcionario encargado de los 9 ancianos se percató de la ausencia de la señora inició su búsqueda sin resultados, siendo finalmente Carabineros quienes encontraron el cuerpo sin vida de la anciana.
La directora del Servicio Nacional del Adulto Mayor en la Región, Ana Eugenia García, lamentó el trágico suceso y adelantó que se iniciará una investigación para determinar las causas y circunstancias en que se produjo el accidente.
Sin embargo, en esta actividad se habría contravenido una de las normas que establece el Sernatur para los viajes turísticos de personas con discapacidad mental.
El sitio oficial de esta entidad describe textualmente que “en el caso de que el tipo de discapacidad sea mental (síndrome de prader willi, síndrome de down, síndrome X frágil, fenilcetonuria, alzheimer u otro similar) deberán viajar con un acompañante.”
En este paseo los 10 ancianos que conformaban la delegación de visita a El Edén de Quillota padecían de Alzheimer y eran acompañados sólo por un cuidador, toda vez que la normativa indica que cada persona debe ir con uno, cuestión que será investigada por la institución.
En el lugar del accidente la policía realizó las pericias forenses pertinentes para descartar la intervención de terceros en la muerte de Lucinda Fuentes.
