La senda hacia la reducción del déficit en España, hasta alcanzar la meta de menos del 3% en 2014, debe “ser razonable”, afirmó este martes el ministro de Economía español, Luis De Guindos.

“Esa una reducción del déficit público que se tiene que producir, que es inevitable, pero que también tiene que hacerse en una senda razonable”, declaró el ministro a su llegada a Bruselas para una reunión con sus homólogos de la Unión Europea.

La Comisión Europea (CE) presentó la semana pasada un panorama negro para España, cuarta economía de la unión monetaria, con un déficit de 6,4% en 2014, más del doble del 2,8% pactado, echando un jarro de agua helada al gobierno español que adoptó medidas draconianas para alcanzar esa meta.

Pese a los drásticos recortes decididos por el gobierno de Rajoy -que provocan un creciente malestar social- el país no logrará, estima la Comisión Europea (CE), limitar su déficit público al 6,3% este año (desde un 9,4% en 2011), sino que la prevé que este se reduzca hasta el 8%.

En lugar del objetivo fiscal de 4,5% fijado para el año próximo, Bruselas prevé que Madrid lo reduzca hasta un 6%.

En ese sentido, el ministro español reafirmó el compromiso de su país para alcanzar la meta fiscal acordada con sus socios de la zona euro.

“El compromiso de España con la reducción fiscal es importante. Es un compromiso que viene dado también por nuestras necesidades de eliminar dudas sobre la financiación de España y ahí no hay ningún tipo de modificación de la estrategia de España”, señaló.

“Todas las decisiones que ha tomado el Gobierno en los últimos meses y en las últimas semanas incluso” responden a ese compromiso, explicó.

En menos de un año de gobierno, el gobierno de Mariano Rajoy ha emprendido durísimas medidas de austeridad y ajustes por 150.000 millones de euros entre 2012 y 2014, diezmando sectores básicos como la salud y la educación.

El lunes, ante el Parlamento Europeo, el ministro fue más categórico: “La reducción del déficit público es ineludible y se tiene que hacer en una senda que se considere prudente y sensata”.

El “esfuerzo de la política fiscal se tiene que medir no solamente por los objetivos nominales de déficit público, sino también por los objetivos de esfuerzo estructural”, subrayó. La Comisión Europea ya dijo que se centrará en el déficit estructural y no en el nominal al momento de evaluar si España cumplió con sus promesas.

En un contexto de una creciente recesión, España se encuentra bajo presión para pedir un rescate más amplio de su economía, pero de momento se resiste a hacerlo.

Según De Guindos, ninguno de sus socios presionó a España para que pida la ayuda financiera al resto de los países de la unión monetaria, lo que activaría inmediatamente el programa de compras de bonos soberanos anunciado por el Banco Central Europeo (BCE).

El asunto que se debatió sí, durante la reunión del Eurogrupo del lunes, es sobre la recapitalización directa de la banca española, que comenzará en diciembre.

“El 1 de diciembre se creará el banco malo, se producirá también a principios de diciembre la recapitalización de la banca española”, dijo.