La Selección Chilena llegó a St Gallen sin las maletas, pues en Madrid la huelga de la línea aérea que los traía les pasó la cuenta. A la llegada, sólo Pepe Rojas rescató la importancia del partido, mientras que el resto fue menos locuaz, tal como ocurrió tras el partido con Argentina. Todos quieren ratificar la confianza y mostrar unión entre el grupo y el cuerpo técnico.