Al menos 11 asesinatos, incluido el de un oficial de la policía, se registraron entre la noche del jueves y la mañana del viernes en el estado de Sao Paulo (sudeste de Brasil), que afronta un alarmante incremento en sus índices de homicidios, informó la prensa local.

El policía fue asesinado a tiros por dos sujetos que, supuestamente, le intentaron robar su moto. El enfrentamiento ocurrió cerca de las 07:00 locales (06:00 horas en Chile), a plena luz del día, en la población de Sao Bernardo do Campos, en el área metropolitana de Sao Paulo, según informó el sitio G1 de Globo.

Las autoridades no descartan, sin embargo, que se trate de una ejecución.

En septiembre, el número de homicidios en el Sao Paulo metropolitano llegó a 144 contra los 71 del mismo mes el año pasado.

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, llamó este jueves al gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, para diseñar un plan conjunto que haga frente a la criminalidad.

“Los equipos se van a reunir a partir del inicio de la próxima semana y van a establecer una buena alianza en todas las áreas que puedan ayudar. Tengo seguridad que la población va a ver rápidamente los beneficios”, dijo Alckmin en un acto oficial este viernes.

Por lo pronto, está descartado seguir el modelo de ocupación de favelas de Rio de Janeiro, que cuenta con el apoyo de las fuerzas militares, según G1 y el diario Folha de Sao Paulo.

“No lo considero necesario (la intervención del Ejército). El estado de Sao Paulo tiene hoy 100.000 policías militares, tiene 30.000 policías civiles, somos el mayor contingente policial de América Latina, hay un gran volumen de inversiones en el estado”, estimó por su parte el comandante general de la policía, Roberval Ferreira França.

El lunes, 600 policías fuertemente armados lanzaron la “Operación Saturación” en la favela de Paraisopolis y sus alrededores, que hasta ahora provocó el arresto de 25 personas, así como el decomiso de armas y drogas.

Operativos similares se repitieron durante esta semana y continuarán en otras barriadas, según dijo el gobernador Alckmin.

“Los servicios de inteligencia de la policía van a ir diciendo cuáles son las comunidades, cuáles son los lugares donde hay necesidad de que se ejecuten”, indicó el responsable.