Policías y manifestantes, empleados de una cooperativa que proporciona servicios a Ikea, se enfrentaron este viernes en Piacenza, en el norte de Italia, donde los trabajadores bloqueaban la entrada a un establecimiento del grupo sueco, informaron los medios.

Cinco manifestantes resultaron heridos leve durante este movimiento de protesta para denunciar “contratos irregulares, horas extra no pagadas y la ausencia de representantes sindicales”.

Los manifestantes, unos 30, tienen el apoyo del sindicato minoritario de izquierda, Cobas, y de jóvenes de extrema izquierda.

Otros empleados de la cooperativa no se sumaron a este movimiento de protesta.

“Los 30 trabajadores (…) que se manifestaron no son empleados de Ikea, sino del subcontratista Consorzio Cgs. Ikea, que tiene un código de conducta desde hace 11 años que incluye criterios claros para todos sus subcontratistas y sus empleados (sanidad, seguridad, contratos, salarios y horarios), solicitó a Consorzio Cgs el respeto de las condiciones contractuales de sus propios trabajadores”, indicó la filial italiana de Ikea en un comunicado.

Después de los numerosos controles efectuados, nunca encontramos violaciones por parte de Ikea”, indicó, por su parte, el alcalde de Piacenza, Paolo Dosi.

El establecimiento de Ikea, situado en las afueras de Piacenza, sirve de base logística a las tiendas de la cadena sueca en todo el norte de Italia.