Julian Assange, refugiado desde hace cuatro meses en la embajada de Ecuador en Londres, parece estar en buen estado físico, según las imágenes de una entrevista con CNN difundida el viernes de noche, pero grabada el miércoles, día en que Quito afirmara estar “muy preocupado” por la salud del fundador de WikiLeaks.

En dichas imágenes, el australiano no parece haber perdido peso y contesta con voz firme a las preguntas que se le formulan.

Assange reiteró a CNN que vivir en una embajada le resultaba “un poco como vivir en una estación espacial”. “No hay luz natural (…) Pero estuve en celda de aislamiento (en diciembre de 2010 en Gran Bretaña) y sé cómo es la vida de los presos. Esto es mucho mejor”, agregó, desde un elegante salón de la embajada.

El miércoles, día en que se grabó esta entrevista, Ecuador había dicho estar “muy preocupado” por el estado de salud de Assange.

“Assange adelgazó mucho y estamos muy preocupados por su salud”, dijo el viceministro ecuatoriano de Relaciones Exteriores, Marco Albuja, a la radio La Voz de Rusia.

“Si se enferma, habrá que elegir entre dos alternativas: tratarlo en la embajada u hospitalizarlo. Es una situación muy seria y puede afectar los derechos de Assange”, agregó el miércoles el diplomático, durante una visita a Moscú.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dijo el viernes que el caso que enfrenta a su país con Gran Bretaña por el asilo político al fundador de WikiLeaks tiene una solución sencilla: que un fiscal sueco lo interrogue en la embajada ecuatoriana en Londres.

Ecuador concedió el asilo a Assange el 16 de agosto pasado. El fundador de WikiLeaks es acusado de abusos sexuales en Suecia y teme que desde este país pueda ser extraditado a Estados Unidos, donde podría ser procesado por haber revelado documentos diplomáticos secretos estadounidenses.