El tribunal militar de apelaciones de Roma confirmó este viernes la condena a cadena perpetua pronunciada en 2011 contra tres ex oficiales nazis acusados de haber participado en la masacre de cientos de civiles italianos en 1944 en las regiones de Toscana y Emilia Romaña, nordeste de Italia.

Los condenados, de casi 90 años, no asistieron al juicio y en cualquier caso son demasiado ancianos para cumplir su condena, de forma que la sentencia tiene sobre todo un valor simbólico.

Los tres oficiales fueron condenados en el 2011 junto con otros 9 militares, pero tres murieron y otros tres fueron absueltos por el tribunal de apelaciones.

El tribunal confirmó la sentencia contra el teniente Hans Georg Karl Winkler, 90 años, el sargento Alfred Luhmann, 87 años y el sargento Wilhelm Stark, 92 años.

El 18 de marzo de 1944 dos compañías de la división Goering perpetraron una masacre cerca a la ciudad de Modena al ordenar la ejecución de 400 personas como represalia por un ataque de la resistencia italiana que provocó la muerte de un oficial y dos soldados alemanes.

Se trató del inicio de una serie de masacres cometidas por los oficiales nazis que ensangrentaron a Italia en 1944, entre ellas la del 12 de agosto en Sant’Anna de Stazzema, en Toscana y que costó la vida a 560 personas.

En otro proceso, el ex oficial de las SS nazis Erich Priebke fue condenado en 1998 a cadena perpetua por su participación en la masacre de las Fosas Ardeatinas, el crimen masivo más grave cometido en la capital italiana por las tropas hitlerianas: 335 rehenes civiles, entre ellos 75 judíos, fueron ejecutados con un tiro en la nuca el 24 de marzo de 1944 en represalia por un ataque de la resistencia contra una unidad de las SS.

Priebke, de 98 años, detenido en Argentina en 1994 tras haber vivido tranquilamente en ese país más de 40 años, fue extraditado y juzgado en Italia, donde cumple reclusión domiciliaria por razones de salud.