Se trata de vecinos del sector Pullehue, ubicado a 5 kilómetros de Panguipulli, quienes marcharon hacia dicha comuna protestando por las consecuencias que ha tenido la permanencia de un vertedero municipal que por 30 años ha generado molestias y riesgos sanitarios en su localidad.

Las familias denuncian tener los pozos infectados, los cursos de aguas contaminados, además de la presencia de perros vagos y aves de rapiña, quienes en su conjunto han provocado la ocurrencia de enfermedades en niños y adultos, además de la baja en la plusvalía de sus terrenos y la estigmatización social de vivir en el sector.

Cabe señalar que el vertedero ha sido el depósito de residuos domiciliarios, donde funciona además la planta de transferencia que no cuenta con requerimientos mínimos para su funcionamiento y el permiso sanitario correspondiente, lo que ha motivado que los vecinos marchen hasta Panguipulli para exigir al Concejo Municipal el cierre de este recinto.