El presidente de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), John Fahey, estimó el martes en una entrevista a una radio australiana que “todo el mundo se dopaba durante la era Armstrong”, un día después de que el ciclista estadounidense fuera desposeido de sus siete Tours de Francia.

“Hubo un período durante el cual la cultura en el ciclismo quería que todo el mundo se dopara. No hay ninguna duda al respecto y los dirigentes (del ciclismo) deben asumir sus responsabilidades”, declaró Fahey a la ABC radio.

“Los testimonios aportados por los que fueron los compañeros de Lance Armstrong, unos tras otros, dicen todos lo mismo: no puedes ser competitivo sin recurrir al dopaje”, añadió el patrón australiano de la AMA.

“A la cuestión de saber si este período está terminado, uno siempre puede preguntárselo. Creo que la UCI se reúne el viernes para estudiar un cierto número de preguntas, incluido cómo ir hacia adelante en este aspecto”, añadió.

En una entrevista, a la cadena de televisión Fox Sports esta vez, Fahey estimó que la federación internacional volvería a encontrar su credibilidad si los dirigentes que estaban durante la era Armstrong no figuran más en el organigrama.

“Si el dopaje estaba tan presente, la cuestión que podemos legítimamente plantearnos es: ¿Quién quería pararlo? ¿Quién trabajaba contra ello? ¿Por qué no se paró todo?”, señaló Fahey.

El precedente presidente de la UCI, Hein Verbruggen, amigo personal de Armstrong, está en el punto de mira, y ciclistas como el escocés David Millar, dopado arrepentido, reclaman su dimisión de su puesto actual de presidente de honor de la Federación Internacional.

El lunes, la UCI ratificó las sanciones de la Agencia Antidopaje Estadounidense (Usada), que había borrado todos los resultados del texano desde el 1 de agosto de 1998, incluidas las siete victorias en la Grande Boucle entre 1999 y 2005, logradas con ayuda de un sistema de dopaje “extremadamente sofisticado”.