El gobierno de Guinea Bissau acusó este domingo a Portugal, la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) y el ex primer ministro Carlos Gomes Junior de fomentar el ataque a un cuartel militar en Bissau para “derrocar al gobierno”.

“El gobierno considera a Portugal, la CPLP y a Carlos Gomes Junior como los promotores de esta tentativa de desestabilización, cuyo objetivo y estrategia” era “derrocar al gobierno”, según el comunicado leído por el ministro de Comunicación,

El texto añade que la meta también era “poner en entredicho todo el proceso político actual con un sólo objetivo, hacer volver a Carlos Gomes Junior al poder, y de paso justificar la presencia de una fuerza internacional” de estabilización en el país.

País pequeño, minado por el narcotráfico entre Sudamérica y Europa y con una historia marcada por la violencia político-militar desde su independencia de Portugal en 1974 tras una guerra de liberación, Guinea Bissau vivió un enésimo golpe de Estado militar el pasado 12 de abril.

El Gobierno de Carlos Gomes Junior fue derrocado por el golpe realizado entre las dos vueltas de los comicios presidenciales después de que Gomes Junior quedara en cabeza en la primera vuelta.

Los alzados, dirigidos por el jefe del estado Mayor, general Antonio Indjai, entregaron el poder a los políticos y firmaron con ellos un acuerdo para la designación de autoridades de transición, dirigidas por el presidente Manuel Serifo Nhamadjo.

Al menos siete personas, entre ellas seis asaltantes, según un balance de la AFP, murieron el domingo al amanecer en el ataque de un cuartel de una unidad de élite del ejército de tierra en Bissau. El Gobierno habla en su comunicado de seis muertos, un herido grave y cuatro detenidos.

Los atacantes estaban dirigidos por el capitán Pansau N’Tchama, perteneciente a esa mis unidad de élite, los “boinas rojas”.

Considerado una persona cercana a N’Tchama mandaba el grupo que en 2009 asesinó al presidente Joao Bernardo Vieira.