Un atentado y dos ataques a mano armada en Bagdad y en el norte de Irak dejaron tres muertos el miércoles, entre ellos un policía, indicaron fuentes médicas y de los servicios de seguridad.

En el este de la capital, una bomba estalló en un mercado matando a una persona e hiriendo a seis, según un responsable del ministerio de Interior y un médico del hospital más cercano, Al Sadr.

También en el este de Bagdad, un conductor de camiones murió por disparos de hombres armados, indicó un responsable del ministerio de Interior y una fuente médica, sin poder precisar la razón del ataque.

En la principal ciudad del norte del país, Mosul, hombres armados mataron a un capitán de policía e hirieron a su hijo de 17 años que estaba cerca del lugar en el momento del ataque, según el primer teniente de policía, Islam al Juburi, y el doctor Mahmud Hadad, del principal hospital de la ciudad.

La violencia en Irak disminuyó considerablemente desde los años sangrientos de 2006-2007, pero todavía es muy frecuente en el país, inmerso desde hace varios meses en una grave crisis provocada por las tensiones entre grupos religiosos.