Por cuarto año consecutivo científicos de la Operación IceBridge de la agencia espacial estadounidense NASA iniciaron el 11 de una campaña de sobrevuelos sobre la Antártica utilizando como base la ciudad de Punta Arenas, para realizar mediciones y observaciones de los cambios de la capa de hielo en esa región.

Los investigadores están utilizando una serie de instrumentos científicos instalados en un avión DC-8 de la NASA, operado por el Centro de Investigación Dryden, que volará hasta mediados de noviembre sobre la superficie glaciar.

Los científicos se encuentran que están observando el ritmo de adelgazamiento de los hielos en puntos claves de la Antártica, como el glaciar Isla Pine ubicado sobre suelo rocoso bajo el nivel del mar. El mayor conocimiento sobre este tipo de cambios es fundamental para proyectar efectos como el aumento del nivel del mar.

La NASA informó que los vuelos de la operación IceBridge permiten llevar una amplia variedad de instrumentos para realizar mediciones remotas sobre la superficie y la capa de hielo de la Antártica y en algunas regiones sobre el lecho oceánico.

El DC-8 transporta una antena de radar MCoRDS (Coherent Radar Depth Sounder) y un mapeador topográfico aéreo ATM (Airborne Topographic Mapper) además de otros instrumentos, incluyendo un altímetro laser para continuar el registro de elevación del hielo iniciado por el satélite Ice, Cloud and Land Elevation (ICESat), cuya misión finalizó en 2009.

Este laboratorio ambulante también incluye radares que pueden distinguir la cantidad de nieve que se acumula sobre la capa de hielo sobre el mar y mapear el terreno rocoso bajo la gruesa capa de hielo.

Si bien los científicos han recogidos datos nuevos y más detallados sobre la capa de hielo, la topografía de la superficie rocosa bajo el hielo de muchos lugares sigue siendo desconocida. La falta de conocimiento del suelo rocoso impide determinar la cantidad exacta de hielo sobre la Antártica.

Asimismo un gravímetro a bordo del DC8 sirve para detectar pequeñas diferencias de gravedad para mapear el fondo del océano bajo las capas de hielo flotante. Los datos sobre batimetría, o de medición de la profundidad del océano, y de la circulación del océano, obtenidos en las misiones IceBridge de años anteriores están ayudando a explicar por qué cambian tan rápidamente algunos glaciares.

Los vuelos despegan desde Punta Arenas y vuelan sobre el Océano Austral para alcanzar destinos como la Antártica Occidental, la Península Antártica y las áreas costeras. Cada uno dura entre 10 y 11 horas.